Organizado por segundo año consecutivo por los comunicadores sociales Arturo Echeverría Guerra y Oscar Fajardo Gil, los preparativos dieron inicio desde temprana hora con la limpieza del área y encendido del fuego que serviría para la cocción del platillo que identifica a los amatitlanecos. Este año se invitó, en calidad de chef principal, al chirinero Julio Gómez "Arpa".
Las ollas fueron colocadas al fuego y poco a poco se fue dando el desfile de ingredientes. Las primeras en llegar a la cita culinaria fueron unas buenas patas de res, cortadas en pequeñas porciones y con una buena dotación de los infaltables "nervios". Ahí se fueron encontrando con otras piezas de carne bovina, como el caso del bolovique y el marranito, algo de hueso de paleta y hueso blanco para que el caldo sustentara.
Casi volando llegaron las gallinas porcionadas aún luciendo buena cantidad de nutritivas y amarillas yemas. Para entonces el sabor ya contaba con el aporte de una buena cantidad de ajos, cebolla y tomates picados.
Don Julio & Cía. Ltda. fueron agregando cangrejos, almejas, jaibas, camarones, licetas, bagres y mojarritas, sin descuidar en ningún momento la buena calidad del fuego que mantenía en ebullición aquel sabroso manjar. Sal, un poco de orégano, cilantro, hierbabuena, jugos de tomate, tallos de cebolla, cremas de mariscos y huevos de gallina, se combinaron con algunas verduras como elotes y papas.
Desde luego hay algunos ingredientes que son secreto de Estado y por eso no los podemos publicar. Eso si, se hace constar que en cada olla fueron agregados 375 cc de "fórmula XL" para la tos y por si las moscas.
A eso de la una de la tarde se dio el banderazo de salida para que los felices comensales se dieran a la tarea de consumir todo lo habido y por haber, despachándose a cada uno en sendas escudillas de barro, acompañando el jolgorio gastronómico con tortillas de maíz, suficiente limón, y un buen chorro de chile chiltepe.
Apenas una hora tardó el chirín del Día Internacional del Trabajo, 1 de mayo, por lo que quienes llegaron tarde se quedaron con las ganas; con pucheros y todo se tuvieron que aguantar 48 horas hasta el siguiente.
Ese primer día nos dio muchísimo gusto saludar a numerosos amigos como Mara Marroquín de Alfaro y su hija Odra Paola, Héctor Leonel Cruz Márquez, Mario Rolando Pineda y Sra., Mélida Leiva de Estrada, Rocío Leiva y su hija, por mencionar solo unos pocos.
Ya para el día principal de la Tradicional y Bicentenaria Feria de la Cruz en honor al Niño Dios de Amatitlán, 3 de mayo, algunos hicieron sus reservaciones con tiempo anunciando que llegarían luego de asistir a la procesión acuática del Zarquito.
Así fue como saludamos al escritor Max Araujo, al arqueólogo Edgar Carpio, al profesor Alberto Orantes Lucas, a los señores Víctor Valdéz y Edgar Morales, promotores culturales de distintos proyectos a nivel nacional, quienes abundaron en positivos comentarios sobre la importancia y trascendencia de esta actividad para la preservación de las costumbres, tradiciones e identidad cultural de los amatitlanecos. En dicha mesa se contó con la presencia del alcalde municipal Mainor Guillermo Orellana Mazariegos y esposa, Sofía Osoy de Orellana, quienes también se manifestaron favorablemente.
Gracias a Dios por sus abundantes bendiciones y por permitirnos realizar nuevamente ésta actividad, gracias por permitirnos demostrar con hechos nuestro sincero amor por Amatitlán, más allá de las palabras. Gracias a Servicable y Lago TV por los cintillos y entrevistas para publicitar este chirín. Gracias a muchos colaboradores como Gregorio Flores (te portaste a las mil maravillas haciendo de todo amigo Goyito), doña Ana Tecún (rico el chilito que nos aportó y muy importante su apoyo para conservar los menjurges). Y desde luego, un millón de gracias a nuestras familias por todo lo que nos ayudaron de múltiples maneras.
Buen provecho a todos !!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Las opiniones de nuestros distinguidos visitantes son BIENVENIDAS. Por favor, respetemos a los demás. Todo comentario ofensivo o denigrante será censurado. EL RESPETO AL DERECHO AJENO ES LA PAZ.