Por: Oscar Fajardo Gil, Cronista de la Ciudad de Amatitlán
"Los hombres verdaderamente grandes nunca mueren, porque perduran sus obras que los vuelven inmortales, impregnan con su espíritu todo lo que hacen, su ejemplo queda para seguirlo y su luz permanece encendida en el corazón y en la mente de quienes los recuerdan con sincero cariño".
Después de varios días en los que se desmejoró su salud, al final de la tarde del último sábado del mes de junio 2020, a los 91 años con siete meses de edad, fue llamado a la Casa del Supremo Creador el distinguido y muy estimado profesional de las ciencias médicas Dr. José Max Palencia Estrada, reconocido con cariño como "Doctor del Pueblo" o "médico de los pobres". Atendió pacientes en su clínica hasta el martes 23 de junio, cuatro días antes de que su corazón dejara de palpitar.
La noticia pronto se conoció en la Ciudad de las perpetuas mengalas, la pepitoria y el mazapán, así como en aldeas, caseríos, fincas y parajes, hasta donde llegó su generosidad y su espíritu de servicio a través de sus conocimientos profesionales. Desde todas partes llegan expresiones y muestras de pesar y condolencia, a pesar de las restricciones y protocolos por la emergencia de la pandemia de coronavirus.
Tuvimos el honor de entrevistarlo en varias ocasiones. Quedan los recuerdos gráficos del 04 de abril del 2018, para documentar el homenaje que la Municipalidad le otorgó como uno de los personajes del mural de la Tradicional y Bicentenaria Feria de la Cruz, imágenes fotográficas de Marco Augusto Gutiérrez y video de José María Zamora García; anteriormente, el 04 de septiembre del 2015, habíamos efectuado otra entrevista con imágenes de Marco Augusto Gutiérrez.
El fruto de nuestras conversaciones quedó plasmado en nuestro libro "Luces de Pampichí", biografías de personajes destacados de Amatitlán, publicado el 19 de octubre de 2018, así como en varias publicaciones en este blog de Lo mejor de Amatitlán.
Por este medio nos unimos a las múltiples muestras de pesar de nuestra comunidad, sin lugar a dudas, podemos expresar que Amatitlán está de luto por el sensible fallecimiento de uno de sus hijos que mejor supo expresar una autentica humanidad de vocación de servicio al prójimo, un hombre correcto y respetuoso con los demás, amante de las costumbres y tradiciones de nuestro pueblo, un buen ejemplo para las presentes y futuras generaciones.
Lástima que sus honras fúnebres se vean disminuidas por los protocolos y el toque de queda general, mañana domingo 28, porque de lo contrario sería acompañado por cientos de personas agradecidas, sin lugar a dudas. El último adiós se lo dará solo la familia. Ganado el derecho y privilegio de estar en presencia de Dios, Nuestro Señor, en el reino de los cielos. Buen viaje estimado Dr. Max Palencia.
La noticia pronto se conoció en la Ciudad de las perpetuas mengalas, la pepitoria y el mazapán, así como en aldeas, caseríos, fincas y parajes, hasta donde llegó su generosidad y su espíritu de servicio a través de sus conocimientos profesionales. Desde todas partes llegan expresiones y muestras de pesar y condolencia, a pesar de las restricciones y protocolos por la emergencia de la pandemia de coronavirus.
Tuvimos el honor de entrevistarlo en varias ocasiones. Quedan los recuerdos gráficos del 04 de abril del 2018, para documentar el homenaje que la Municipalidad le otorgó como uno de los personajes del mural de la Tradicional y Bicentenaria Feria de la Cruz, imágenes fotográficas de Marco Augusto Gutiérrez y video de José María Zamora García; anteriormente, el 04 de septiembre del 2015, habíamos efectuado otra entrevista con imágenes de Marco Augusto Gutiérrez.
El fruto de nuestras conversaciones quedó plasmado en nuestro libro "Luces de Pampichí", biografías de personajes destacados de Amatitlán, publicado el 19 de octubre de 2018, así como en varias publicaciones en este blog de Lo mejor de Amatitlán.
Por este medio nos unimos a las múltiples muestras de pesar de nuestra comunidad, sin lugar a dudas, podemos expresar que Amatitlán está de luto por el sensible fallecimiento de uno de sus hijos que mejor supo expresar una autentica humanidad de vocación de servicio al prójimo, un hombre correcto y respetuoso con los demás, amante de las costumbres y tradiciones de nuestro pueblo, un buen ejemplo para las presentes y futuras generaciones.
Lástima que sus honras fúnebres se vean disminuidas por los protocolos y el toque de queda general, mañana domingo 28, porque de lo contrario sería acompañado por cientos de personas agradecidas, sin lugar a dudas. El último adiós se lo dará solo la familia. Ganado el derecho y privilegio de estar en presencia de Dios, Nuestro Señor, en el reino de los cielos. Buen viaje estimado Dr. Max Palencia.
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