Por: Oscar Fajardo Gil, Cronista de la Ciudad de Amatitlán
Frente a la galería de personajes ilustres de Guatemala y a la urna del Himno Nacional, en el auditorio del segundo nivel de la Biblioteca Nacional "Luis Cardoza y Aragón" fue presentado el libro TIERRA DE AMATLES, segunda edición, del Cronista de la Ciudad de Amatitlán, Oscar Fajardo Gil.
La actividad, organizada por la Casa de la Cultura del Centro Histórico de la Ciudad de Guatemala, contó con la participación en calidad de comentaristas de: Lic. Max Araujo, director de la oficina del Patrimonio Bibliográfico y Documental del Ministerio de Cultura; Licda. Euda Morales de la Red Latinoamericana de Cronistas - Relac; y de la Dra. Artemis Torres, Directora de la Escuela de Historia de la Universidad de San Carlos de Guatemala. La presentación se llevó a cabo el primer viernes de la cuaresma 2020, a partir de las seis de la tarde.
Araujo fue el primero en referirse a la importancia de una monografía, que constituye un compendio de lo que es un municipio como el caso de Amatitlán, incluyendo lo histórico y geográfico tanto como lo relativo a su cultura, costumbres, tradiciones, identidad y, por sobre todo, a sus personajes diversos. "Por más que se haga el esfuerzo siempre hará falta algo o alguien, es una tarea muy compleja y extensa que no se logra completar así sea una gran cantidad de páginas. Pero es evidente que esta monografía ha sido un trabajo de mucho tiempo y dedicación, dando como resultado un documento importante de consulta para la población en general", expresó Araujo.
Euda Morales, representante de Relac, manifestó: "Debo reconocer que la primero que he buscado en el índice ha sido lo relacionado a las tradiciones gastronómicas.He encontrado datos relevantes en el "sabor del rezado" y de las "estacioneras" con su venta de los tradicionales dulces y viandas. Después de leer el listado de comidas como las mojarras fritas, tostaditas cuaches con frijoles, la enchiladas, las pacayas envueltas, los chiles rellenos, un caldo de gallina criolla o algún recado, se apetecen y traen a la memoria recuerdos imborrables..."
"Aunque la comida que se más se detalla es el chirín, siendo el plato amatitlaneco por excelencia, preparado con las especies que existían en el lago de Amatitlán, como caracoles, jutes, mojarras, siricas, camarones de agua dulce... Lo curioso es que es una comida preparada solo por hombres. Sabiendo que Ud., Cronista Fajardo Gil, es chirinero desde hace años, estaré pendiente de conocer más de este platillo y ojalá degustarlo en algún momento", comentó Morales.
La Dra. Artemis Torres, hizo de gala de haber dado lectura a buena parte del libro de Fajardo Gil, por lo que sus abundantes comentarios abarcaron varios capítulos específicos: "Además historia, geografía, costumbres, tradiciones, educación, cultura, deportes, flora, fauna y otros elementos acostumbrados en este tipo de documentos, también incluye la crónica de la verdad desde la perspectiva del testigo de los hechos actuales. Esta monografía va más allá de lo común y tradicional, porque el Cronista de la Ciudad está documentando a mujeres valerosas, emprendedoras, a mujeres y movimientos populares. Está documentando los fenómenos naturales y sus consecuencias, valiosa información para las futuras generaciones.
Pero al autor no se le debe valorar solamente por su desempeño como escritor, se mide también por su sencillez, se mide por su sensibilidad, por la pasión con la que investiga, recopila y cuenta lo que acontece. En sus agradecimientos y en las dedicatorias se encuentra un ser humano que comprende que su trabajo ha sido posible por el valioso aporte de otras personas a su alrededor. El autor nos dice: aquí está este trabajo que no es solo mío, pues le pertenece a la comunidad. Eso es humildad que distingue a las personas que tienen nobleza en su interior y comparten el producto de sus conocimientos y su experiencia.
También tiene el valor de pasar por la denuncia y la crítica ante situaciones que considera que no están bien o con las cuales no está de acuerdo, tal el caso del nombre del parque central de Amatitlán, del mal manejo del teleférico o de los resultados de la gestión de la entidad que debe ser responsable por el rescate y conservación del lago", expresó la Directora de la Escuela de Historia de la USAC.
Por su parte, mencionando que gracias a Dios este es el 12° libro que publica, el Cronista de la Ciudad de Amatitlán se refirió brevemente a su obra y agradeció los comentarios del panel de tan distinguidos profesionales; así como al Presidente de la Casa de la Cultura del Centro Histórico, Sr. Víctor Valdéz, por la organización de esta presentación.
Araujo fue el primero en referirse a la importancia de una monografía, que constituye un compendio de lo que es un municipio como el caso de Amatitlán, incluyendo lo histórico y geográfico tanto como lo relativo a su cultura, costumbres, tradiciones, identidad y, por sobre todo, a sus personajes diversos. "Por más que se haga el esfuerzo siempre hará falta algo o alguien, es una tarea muy compleja y extensa que no se logra completar así sea una gran cantidad de páginas. Pero es evidente que esta monografía ha sido un trabajo de mucho tiempo y dedicación, dando como resultado un documento importante de consulta para la población en general", expresó Araujo.
Euda Morales, representante de Relac, manifestó: "Debo reconocer que la primero que he buscado en el índice ha sido lo relacionado a las tradiciones gastronómicas.He encontrado datos relevantes en el "sabor del rezado" y de las "estacioneras" con su venta de los tradicionales dulces y viandas. Después de leer el listado de comidas como las mojarras fritas, tostaditas cuaches con frijoles, la enchiladas, las pacayas envueltas, los chiles rellenos, un caldo de gallina criolla o algún recado, se apetecen y traen a la memoria recuerdos imborrables..."
"Aunque la comida que se más se detalla es el chirín, siendo el plato amatitlaneco por excelencia, preparado con las especies que existían en el lago de Amatitlán, como caracoles, jutes, mojarras, siricas, camarones de agua dulce... Lo curioso es que es una comida preparada solo por hombres. Sabiendo que Ud., Cronista Fajardo Gil, es chirinero desde hace años, estaré pendiente de conocer más de este platillo y ojalá degustarlo en algún momento", comentó Morales.
La Dra. Artemis Torres, hizo de gala de haber dado lectura a buena parte del libro de Fajardo Gil, por lo que sus abundantes comentarios abarcaron varios capítulos específicos: "Además historia, geografía, costumbres, tradiciones, educación, cultura, deportes, flora, fauna y otros elementos acostumbrados en este tipo de documentos, también incluye la crónica de la verdad desde la perspectiva del testigo de los hechos actuales. Esta monografía va más allá de lo común y tradicional, porque el Cronista de la Ciudad está documentando a mujeres valerosas, emprendedoras, a mujeres y movimientos populares. Está documentando los fenómenos naturales y sus consecuencias, valiosa información para las futuras generaciones.
Pero al autor no se le debe valorar solamente por su desempeño como escritor, se mide también por su sencillez, se mide por su sensibilidad, por la pasión con la que investiga, recopila y cuenta lo que acontece. En sus agradecimientos y en las dedicatorias se encuentra un ser humano que comprende que su trabajo ha sido posible por el valioso aporte de otras personas a su alrededor. El autor nos dice: aquí está este trabajo que no es solo mío, pues le pertenece a la comunidad. Eso es humildad que distingue a las personas que tienen nobleza en su interior y comparten el producto de sus conocimientos y su experiencia.
También tiene el valor de pasar por la denuncia y la crítica ante situaciones que considera que no están bien o con las cuales no está de acuerdo, tal el caso del nombre del parque central de Amatitlán, del mal manejo del teleférico o de los resultados de la gestión de la entidad que debe ser responsable por el rescate y conservación del lago", expresó la Directora de la Escuela de Historia de la USAC.
Por su parte, mencionando que gracias a Dios este es el 12° libro que publica, el Cronista de la Ciudad de Amatitlán se refirió brevemente a su obra y agradeció los comentarios del panel de tan distinguidos profesionales; así como al Presidente de la Casa de la Cultura del Centro Histórico, Sr. Víctor Valdéz, por la organización de esta presentación.