Por: Óscar Fajardo Gil, Cronista de la Ciudad de Amatitlán
Hace medio siglo, allá por 1968, Víctor Manuel era un muchacho de 16 años de edad, fue cuando aprendió con su padre a hacer helados de nieve de leche. Desde entonces, también recorre diariamente, desde media mañana hasta el atardecer, las calles de la Ciudad de Amatitlán ofreciendo la helada golosina artesanal a niños, jóvenes y adultos.Don Andrés Prem su papá, según Víctor Manuel, fue uno de los primeros heladeros de Amatitlán; era frecuente verlo en la plaza central, por la antañona ceiba o frente al cine. La familia Prem García, vivía por el rumbo de la 5ª avenida entre 8ª y 9ª calles "por donde "el Chucho"".
A Víctor Manuel Prem García (1952), lo conocí personalmente a mediados de la década de 1990 cuando junto a su familia eran guardianes nocturnos de la escuelita de párvulos "María Amanda Iréne López Reyes"; mientras que durante el día era heladero de carretilla de madera.
Ahora, con su carretilla pintada de celeste y rojo en la que se lee el rótulo "Disfrute Helados Memín" lo encontré a la salida del Hospital Nacional de Amatitlán ofreciendo sus helados a quienes entran y salen de la visita de pacientes.
Es un hombre sencillo y trabajador, merecedor de nuestro respeto y reconocimiento por ganarse el pan diario y el sustento familiar de manera honrada durante 50 años. Dios lo bendiga !!!
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